†→Recuerdos de un adiós←†

Recuerdos de un adiós.


Fue una tarde soleada cuando nos despedimos,
recuerdo el cálido viento que volaba tus
cabellos, recuerdo lágrimas caér de tus
ojos al ver morir los sueños que perdimos.
Y allí nos dijimos adiós, tomé tu mano y en
un abrazo besé también tu corazón.

Y en el camino hacia el olvido, recordaba tu
risa y tu dolor, y en los atardeceres te
dedicaba en silencio recuerdos de amor.
Extrañando el universo en tu mirada, el eco de
tu voz, el tibio beso de tu boca y el
terciopelo de tus manos, tu frío y tu calor.

Ya muy lejos me detuve y con la vista
quebrada miré hacia atrás, observando mi
pasado y aquel presente que nunca volverá.
Allí emanaron dos lágrimas de mis ojos
en honor a ti, una era el principio de
nuestra historia y la otra nunca tendrá fin.




†→H4D3S←†

†→Recuérdame←†

Recuérdame siempre, mi eterno amor,
cuando te sientes por las tardes a
ver morir el sol. Cuando el frío viento
de los atardeceres bese tu tierna,
suave y bendita piel, cuando mi nombre
se hunda en tu silencio y muera con él.

Recuérdame siempre un poco más cuando
mires la luna llena, yo seré la tenue
luz que iluminará y llenará el inmenso
vacío de tu pena. Viviré en cada lágrima
que emane de tus ojos, viviré aún estando
muerto, en tus suspiros mentales y en
los tristes y helados abismos de tu ser.

Sentirás una gran melancolía, pero imagina
mi amor, que solo me perdí por un día, aunque
ese día sea para mi una eternidad. Siempre
estaré dormido entre tus brazos, en tu boca
vivirá mi boca, en tu tacto vivirá mi piel.

Recuérdame cuando escuches cantar
los ruiseñores, cuando en tu jardín de
esperanzas renazcan nuevas flores.



†→H4D3S←†

†→Amada Cruel←†

Estoy sentado en mi memoria y veo
como uno a uno se van desangrando
mis pensamientos.No hay dolor ni
llanto, solo una gran melancolía.

Te veo nadando entre la sangre,
estás bebiendo mis penas muertas,
mis sueños rotos, mis ilusiones,
vas matando a cada trago mi fe.

Tu que fuiste mi ángel por las noches
y mi sombra cada día. Tu que en mis
tristezas siempre fuiste mi alegría,
y en el fondo de tus ojos me dormías.

En tu mundo imaginé mi mundo, en tu
piel siempre nadó mi piel. En tus
manos puse mi vida, mi muerte siempre
estuvo sentada junto a tus pies.

Fuiste el sueño que soñé despierto,
el más hermoso que jamás pude tener.
Fuiste la pesadilla que soñé dormido,
la más horriblemente bella que logré tener.

Te volví santa, como una virgen para
mi fe. Nunca hubo veladoras en tu
altar, pero la luz que emanaba de mi
alma, siempre iluminó tu ser.

Sigo sentado en mi memoria, y el
ultimo pensamiento se derrama y tu
te ahogas en él. Tu mundo nunca fue
mi mundo, tu altar no se mereció mi fe.

Mis sueños siempre fueron rotos,
mi muerte no fue valorada por tu ser.
Fuiste un ángel cruel que me llevó
hasta el cielo y me dejó caér.


†→H4D3S←†

†→Poema de un Recuerdo←†

Dime por favor donde no estás, en
qué lugar puedo no ser tu ausencia
dónde puedo vivir sin recordarte, y
dónde recordar, sin que me duela.

Dime por favor en que vacío no está
tu sombra llenando los centros; dónde
mi soledad es ella misma, y no el
sentir que tú te encuentras lejos.

Dime por favor por qué camino podré
yo caminar, sin ser tu huella; dónde
podré correr no por buscarte, y
dónde descanzar de mi tristeza.

Dime por favor cuál es la noche que
no tiene el color de tu mirada; cuál
es el sol, que tiene luz tan solo, y
no la sensación de que me llamas.

Dime por favor donde hay un mar, que
no susurre a mis oídos tus palabras.

Dime por favor en qué rincón nadie
podrá ver mi tristeza; dime cuál es
el hueco de mi almohada, que no tiene
apoyada tu cabeza.

Dime por favor cuál es la noche en que
vendrás, para velar tu sueño; que no
puedo vivir, porque te extraño;
y que no puedo morir, porque te quiero.



†→Gustavo Alejandro Castiñeiras←†

†→Pena Muerta←†

Me pregunto si algún día volveré a ver
reflejado nuevamente mi rostro en tu sonrisa...
Llueve día y noche en los cielos de mi memoria,
Vuelo sin descanso queriendo encontrarte
en esos cielos vacíos sin estrellas.

Nubes grices danzan en el abismo de mis ojos,
navegando lentamente en un océano de melancolía
y de muerte. Mis manos frías se posan en el
cálido vacío que a mi lado dejaste. Lloro
al verte entre la nada y no poder tocarte.

Escucho solo el llanto del silencio, el eterno
y sombrío silencio al que me encadenaste. Mi
voz ha muerto y duerme en el cementerio del
olvido. Soy esclavo del recuerdo de tus besos y
tu piel; Besos tibios y fríos con sabor a miel.

Y así pasa el tiempo y sigo preguntandome tantas
cosas... Si algún día mi sombra podrá abrazar
tus huellas, como la arena es abrazada por el mar.
Veo pasar lunas frías junto a mi puerta, Y dos
lágrimas caen de un cielo oscuro y bañan de
sangre mi recuerdo y mi pena muerta.



†→H4D3S←†

†→Nada resta de ti←†

Nada resta de ti... te hundió el abismo...
te tragaron los monstruos de los mares.
No quedan en los fúnebres lugares ni los
huesos siquiera de ti mismo.

Fácil de comprender, amante.... es que
perdieras en el mar la vida, mas no
comprende el alma dolorida cómo yo
vivo cuando tú ya has muerto.

Darnos la vida a mí y a ti la muerte;
darnos a ti la paz y a mí la guerra,
dejarte a ti en el mar y a mí en la tierra
es la maldad más grande de la suerte!



†→Carolina Coronado←†

†→Después del Amor←†

Ya no existe la magia, Nos conocimos
como otras personas, Tus ojos ya no
obran milagros, Tampoco mis besos
en tus manos.

Tu has sido el viento y yo el mar,
-¿Esplendores? Nunca más- He crecido
apática como el lago Que duerme junto
a la orilla.

Y aunque el lago esté a salvo de la tormenta,
Y del caprichoso baile de la marea, Aquello
que todos ven en mi como Paz, Es tan amargo
como la oscuridad del mar.



†→Sara Teasdale←†

†→La Proximidad del Amor←†

Pienso en ti, cuando los rayos dorados
Del sol brillan sobre el mar; Y cuando
las olas reflejan los pálidos Ecos
de la luna, pienso en ti.

Veo tu forma, cuando en la distante
mañana Se elevan suaves nubes de polvo;
En la noche profunda, sobre las rutas
de la montaña, Yo veo tus ojos.

Te escucho, cuando las mareas del
océano retornan Y se regocijan en
sonoros bramidos; En el páramo solitario,
en la quietud anhelo, Y escucho tu voz.

Me detengo contigo, aunque tú eres
lejanía tu sombra habita cerca.
Crepúsculo, la noche abre su puerta,
Amada, te necesito, siempre, eterna.




†→Henry Van Dyke ←†

†→El paso del Amor←†

Oh Dios! Perdona que haya hundido mi
vida en un oscuro Sueño de Amor.
¿Las lágrimas de la angustia alguna
vez Lavarán la pasión de mi sangre?

El Amor custodia mi corazón En un
canto de alegría, Mi pulso tiembla
con su melodía; Mientras las frías
ráfagas del invierno soplan Sobre mi,
como una dulce brisa de junio.

El Amor flota sobre las brumas del
amanecer, Y descansa en los rayos
del crepúsculo; Él calmó el trueno de
la tormenta E iluminó todos mis sentidos.

El Amor me sostiene a través del día,
Y en sueños me acompaña por las noches,
Ningún mal puede acechar mi vida, Pues
mi espíritu es ligero como las flores.

Oh Cielo! Piedad por mi corazón inocente,
El paso del tiempo quebró ese placer diario,
El ídolo fue arrastrado por la corriente,
Destrozando para siempre mi santuario.



†→Elizabeth Siddal ←†

†→Antes que tu me Moriré←†

Antes que tú me moriré: escondido en
las entrañas ya el hierro llevo con
que abrió tu mano la ancha herida mortal.

Antes que tú me moriré: y mi espíritu, en
su empeño tenaz se sentará a las puertas
de la Muerte, que llames a esperar.

Con las horas los días, con los días los
años volarán, y a aquella puerta llamarás
al cabo. ¿Quién deja de llamar?

Entonces que tu culpa y tus despojos la
tierra guardará, lavándote en las ondas
de la muerte como en otro Jordán.

Allí, donde el murmullo de la vida
temblando a morir va, como la ola que
a la playa viene silenciosa a expirar.

Allí donde el sepulcro que se cierra
abre una eternidad, todo lo que los
dos hemos callado lo tenemos que hablar.



†→Gustavo Adolfo Becquer←†